Alimentación y cáncer

alimentación saludableEl consumo de nutrientes de frutas y verduras reducir el riesgo de cáncer de páncreas
En síntesis, nuestro estudio sugiere que los nutrientes que se obtienen al seguir una dieta rica en frutas y verduras (y, en menor grado, de los suplementos nutritivos) se asocian a una disminución del riesgo de padecer cáncer pancreático, y que esta reducción depende de la dosis. A pesar de que este análisis de nutrientes concretos puede ofrecer un posible procedimiento dirigido y nuevas vías de estudio, es importante recordar que los alimentos no se consumen por separado. Aunque se desconoce el mecanismo exacto, nuestros resultados sugieren con bastante claridad que ingerir frutas y verduras y sus correspondientes nutrientes reducirá el riesgo de padecer adenocarcinomas pancreáticos. Es esencial desde un punto de vista de la profilaxis, fomentar una dieta rica en frutas y verduras que contenga un gran número de nutrientes posiblemente beneficiosos. Leer estudioLeer estudio en español

 Caquexia y cáncer de pancreas: ¿Hay opciones de tratamiento?
A pesar de que se ha realizado una gran cantidad de investigaciones experimentales, clínicas y preclínicas durante los últimos 10 años, todavía no hay un tratamiento eficaz para los pacientes oncológicos que padecen caquexia. En el caso del cáncer pancreático, la caquexia se presenta en hasta un 80% de pacientes y contribuye en gran medida a la morbimortalidad relacionada.Puesto que hay un gran número de factores que llevan a la aparición de caquexia en estos pacientes, es preciso implantar un enfoque terapéutico multimodal en el que se incluyen el soporte nutricional y la intervención farmacológica, así como el tratamiento de los síntomas que agravan la pérdida de peso (tales como el dolor crónico, los trastornos digestivos, la fatiga y la depresión). Asimismo, los diversos procedimientos deben implantarse de manera progresiva, y ha de iniciarse con el soporte nutricional oral y el consejo dietético en el momento del diagnóstico. Deben realizarse pruebas de detección sistemática y una monitorización de la caquexia de manera periódica, a poder ser mediante el uso de técnicas basadas en el empleo de TC.
Tras revisar los enfoques nutricionales y farmacológicos actuales empleados para tratar la caquexia, parece ser que lo más prometedor es emplear protocolos combinados con fármacos y nutrientes antiinflamatorios y antioxidantes. El tratamiento con sustancias individuales tales como las progesteronas o los inhibidores de TNF-α ha manifestado no tener éxito y expone de manera innecesaria al riesgo de padecer un gran número de efectos secundarios a estos pacientes.
Los nuevos tratamientos dirigidos derivados de una amplia investigación en modelos animales se yerguen prometedores en el futuro. En particular, los fármacos dirigidos a la IL-6 y sus posteriores dianas así como la vía metabólica miostatina/ActR II b resultan halagüeños. Sin embargo, los nuevos enfoques terapéuticos solo estarán disponibles fuera de los ensayos clínicos cuando se conceda la autorización de comercialización. Por menos, es válido en lo que respecta a nuevas entidades químicas o nuevas indicaciones para fármacos ya existentes. A pesar de estar a la espera de los resultados de los ensayos clínicos en curso, recomendamos con firmeza la realización de más investigaciones y ensayos clínicos sobre nuevos tratamientos para este grave trastorno. Asimismo, deben normalizarse los criterios diagnósticos y el diseño de los ensayos clínicos tanto como sea posible con el fin de poder realizar análisis y comparaciones de los futuros ensayos de intervención más significativas.  Leer estudioLeer estudio en español

Polifenoles dietéticos pueden afectar la metilación del DNA
Los estudios analizados se centran en la inhibición de las DNMT y de la hipermetilación de citosina del promotor así como en la reactivación de algunos genes silenciados por metilación mediante el uso de EGCG, genisteína u otros compuestos relacionados. Aunque la activación de los genes silenciados por metilación de las estirpes celulares mediante el empleo de estos compuestos se corresponde con la inhibición de la actividad enzimática de las DNMT presente en los extractos nucleares, también podría ser que otros mecanismos de acción como la inhibición de las HDAC desempeñasen un papel. Las concentraciones de EGCG eficaces (10–50 μmol/L) observadas en los estudios con estirpes celulares son ∼50 veces más altas que los niveles de EGCG en tejido y plasma normalmente observadas tras la ingesta de té. La cavidad oral tiene un contacto directo y puede estar expuesta a niveles altos de EGCG. Las concentraciones de genisteína eficaces observadas (5–20 μmol/L) para la desmetilación de DNA se aproximan a las de nivel de genisteína en plasma registradas en mujeres tras el consumo de productos de soja, pero aún así siguen siendo más altas (0.7–6.0 μmol/L). Todavía ha de determinarse si el EGCG, la genisteína u otros polifenoles alimentarios pueden revertir la hipermetilación del DNA y reactivar los genes silenciados in vivo. Una consideración clave es si el tratamiento celular o animal con estas sustancias a largo plazo puede aumentar su eficacia; esta materia merece la realización de más investigaciones.
La posibilidad de que los catecol polifenoles puedan inhibir las DNMT de manera indirecta al disminuir la SAM y aumentar la SAH es muy interesante. El elemento clave de esta hipótesis es que la SAH es un potente inhibidor de las DNMT. Nuestros estudios, sin embargo, sugieren que este tipo de inhibición puede no tener lugar in vivo debido que no se observaron concentraciones elevadas de SAH en los tejidos y solo se percibió una modesta disminución de los niveles de SAM tras la administración oral de EGCG. Únicamente una dosis alta de EGCG causa una disminución notable de los niveles de SAM (y SAH) en el hígado; esta situación podría asociarse a toxicidad.
El consumo de polifenoles con los alimentos sólidos y líquidos no tendrá un efecto importante sobre la metilación del DNA en animales y humanos con una dieta normal. El efecto podría ser más significativo, sin embargo, si la dieta tiene cantidades limitadas de donantes de grupos metilo. Con el consumo de grandes cantidades de polifenoles a través de suplementos alimenticios, las concentraciones elevadas de polifenoles en los tejidos puede afectar a la metilación del DNA. Esto aún está por demostrar. También puede tratarse de una situación en la que es necesario ir con precaución para evitar una posible toxicidad debida a la oxidación de los polifenoles. Para la profilaxis del cáncer, una combinación de inhibidores de las DNMT a base de polifenoles junto con inhibidores de las HDAC, tales como el ácido butírico o el sulforafano, u otros inhibidores representa un enfoque prometedor.  Leer estudio

La genisteína aumenta la eficacia de la quimioterapia con cabazitaxel en células de cáncer de próstata resistente a la castración metastásico
Este estudio proporcionó los primeros datos preclínicos que respaldan que la genisteína podría tener un efecto beneficioso a la hora de mejorar la quimioterapia con cabazitaxel para tratar el cáncer de próstata resistente a la castración metastásico.  Leer estudio

Polifenoles: aspectos clave involucrados en la quimioprevención del cáncer de próstata
Puesto que el cáncer de próstata es uno de los problemas médicos más relevantes que aqueja a la población masculina, las estrategias de quimioprevención representan un enfoque prometedor para reducir su incidencia y mortalidad. Desgraciadamente, los datos científicos de que se dispone respecto a los polifenoles todavía han de ponerse de manifiesto y se requieren estudios clínicos bien realizados para esclarecer cuál es la eficacia de estas moléculas a la hora de evitar el cáncer de próstata.
Debe regularse mejor el uso extendido de diferentes agentes nutritivos; de hecho, al ser productos extraíbles y no sintéticos, pueden provocar una gran diversidad de resultados terapéuticos.
De entre todos los mecanismos de acción, estos compuestos han mostrado tener efectos antioxidantes mediante vías moleculares parecidas, lo cual indica un posible uso de las asociaciones de estos polifenoles, pero no se han inducido resultados.
A pesar de que hasta la fecha se han realizado una gran cantidad de estudios in vitro, se cuenta solo con unos pocos ensayos clínicos en los que se use concentraciones precisas de estos compuestos. Por estos motivos, recomendamos la realización de más investigaciones y estudios más amplios para obtener pruebas concluyentes. A pesar de todo, hay diferentes mecanismos de acción biomoleculares prometedores, los cuales sugieren una aplicación real para la prevención del cáncer de próstata. La inhibición de la angiogénesis, la inducción de la apoptosis y la reducción del volumen tumoral representan un comienzo para las futuras estrategias de quimioprevención prostática, y entender el mecanismo de acción subyacente, especialmente en el caso del ser humano, podría cambiar la evolución natural de este tumor. Leer estudio

La genisteína coopera con el inhibidor de histona desacetilasas vorinostat en la inducción de la apoptosis de células de cáncer de próstata
Es probable que los efectos del tratamiento con genisteína sobre la epigenética y la expresión génica se deba principalmente a los cambios experimentados en la acetilación de histonas y no a la metilación de CpG. De manera parecida a lo observado en informes anteriores, en los datos de la matriz, percibimos un aumento de HAT1 al implantar un tratamiento con genisteína y un aumento de las concentraciones proteicas de HAT1. Este cambio de la expresión de HAT1 podría ofrecer un mecanismo para el aumento de acetilación de H3K9 y explica por qué se activaron levemente los genes inhibidores de Wnt tales como el SOX7 al implantar un tratamiento con genisteína a pesar de la falta de cambio en la metilación de CpG. Observamos cambios en un gran número de genes y vías metabólicas (como la vía TNF-NFκB y la detención del ciclo G2/M en respuesta a la lesión y reparación del DNA) los cuales se vieron afectados debido a los efectos combinados de la genisteína y el vorinostat.
En conclusión, hemos puesto de manifiesto que la genisteína puede utilizarse de manera conjunta con el vorinostat para inducir la apoptosis; no obstante, han de realizarse más estudios en el futuro para validad esta combinación en un contexto clínico. Leer estudio

Actividad anticancerosa de la combinación genisteína topotecán en células de cáncer de próstata
Los datos globales remarcan la posible importancia de la genisteína como adyuvante a la quimioterapia y del tratamiento combinado de Gn-TPT a la hora de inducir la apoptosis de LNCaP mediante la elevación de los niveles de caspasa-9 y caspasa-3 y de la expresión de especies reactivas del oxígeno en las células.  Leer estudio

La quimioprevención del cáncer de próstata: compuestos naturales, antiandrógenos y antioxidantes: datos in vivo
A la hora de producir tratamientos preventivos que no causen daños y tengan una gran actividad contra patologías relevantes desde el punto de vista clínico, será crucial realizar un esfuerzo concertado y bien coordinado para desarrollar sustancias para la quimioprevención del cáncer prostático. Para ello, habrá de aplicarse un enfoque racional con el fin de traducir datos preclínicos relevantes y reproducibles en ensayos clínicos validados en base a sustancias prometedoras. La biodisponibilidad de las sustancias para la próstata y el metabolismo sistémico y prostático de tales sustancias puede ser de gran importancia, pero aún no se estiman lo suficiente, puesto que hay pocos datos relevantes tanto de modelos preclínicos como de ensayos clínicos. No se ha considerado que los antioxidantes tengan actividad contra el desarrollo del cáncer de próstata, mientras que no se ha avanzado en lo que respecta al empleo varias sustancias naturales en estudios traslacionales. Las sustancias dirigidas contra mecanismos andrógenos han reducido la detección de cáncer de próstata, pero se desconoce si estos compuestos reducen la mortalidad específica por cáncer de próstata o disminuyen sustancialmente la progresión de la enfermedad. En el caso de otras sustancias, se ha adoptado un enfoque mal coordinado para su desarrollo como quimiopreventivos y/o han sido probadas en ensayos clínicos limitados o no concluyentes. Varios problemas en este sentido son: (1) a menudo, no se publican los resultados negativos (es decir, falta de actividad) y efectos posiblemente dañinos de las sustancias candidatas; (2) con frecuencia, se considera que la quimioprevención no es rentable para las industrias farmacéutica y alimentaria, de manera que se limitan las inversiones; y (3) los organismos de financiación se muestran indecisos a la hora de establecer un enfoque cohesionador y bien coordinado para desarrollar sustancias quimiopreventivas, ya que apuestan por los métodos ideados por los investigadores que, casi por definición, están abocados a la falta de coordinación. Asimismo, el cáncer de próstata es una patología muy heterogénea a nivel molecular, lo que impide el desarrollo farmacológico quimiopreventivo dirigido. También, la mayor parte de sustancias quimiopreventivas posee un gran número de actividades complejas que pueden ser no lineales en lo que respecta a la dosis y las interacciones con otros factores de carácter genético (p. ej., polimorfimos en genes esenciales) y ambiental (p. ej., dieta). Por último, el cáncer de próstata, como patología, nos presenta más problemas que plantean retos importantes en lo que respecta al diseño de ensayos clínicos sobre quimioprevención y la interpretación de sus resultados: (a) la mayor parte de cánceres de próstata detectadas clínicamente en los Estados Unidos y otros países occidentales no son importantes desde el punto de vista clínico en el sentido de que no producen mortalidad específica por cáncer; (b) la prevalencia de los cánceres de próstata de tamaño microscópico muchas veces de dudosa importancia clínica es muy alta en varones de mediana edad y edad avanzada de todo el mundo; y (c), en el presente, es difícil diferenciar los cánceres relevantes de los irrelevantes desde el punto de vista clínico en la mayoría de los casos. Las buenas noticias son que algunos de modelos preclínicos disponibles en la actualidad permiten predecir el resultado de los ensayos clínicos y ofrecerán resultados útiles para el desarrollo de enfoques racionales para la quimioprevención del cáncer de próstata. Leer estudio

Recuperación de la sensibilidad a la quimioterapia de las células de cáncer de próstata mediante la inhibición y atenuación funcionales de las proteínas multirresistentes a fármacos
En el caso del cáncer de próstata, una respuesta baja a la quimioterapia podría explicarse, en parte, debido a la sobreexpresión de proteínas multirresistentes. Debe evaluarse la expresión y la función de esas proteínas para potenciar la eficacia de los tratamientos basados en docetaxel en pacientes con cáncer de próstata resistente a hormonas. Leer estudio

Mecanismos quimioprotectores sinérgicos de los fitoestrógenos alimentarios al combinarlos de manera selectiva contra el cáncer de próstata
Los resultados de nuestro estudio sugieren utilizar una combinación de fitoestrógenos de acción antineoplásica seleccionados a propósito podría aumentar sensiblemente la eficacia de cada uno de los compuestos, lo cual daría lugar a una mejora de la eficacia a concentraciones máximas alcanzables desde el punto de vista fisiológico. Los mecanismos de combinación de diversas sustancias fitoquímicas pueden ser un indicativo del potencial que tienen algunos compuestos de dietas vegetarianas de provocar un efecto quimiopreventivo contra el cáncer de próstata si se dan en concentraciones alcanzables desde el punto de vista fisiológicos, in vivo. Leer estudio

La genisteína invierte hipermetilación e provoca modificaciones de las histonas activas en gen supresor tumoral BTG3 en el cáncer de próstata
En conclusión, nuestro estudio es el primer informe en mostrar que, en el caso del cáncer de próstata, el gen supresor tumoral BTG3 es silenciado desde el punto de vista epigenético y que puede ser reactivado mediante la desmetilación del promotor y la modificación de histonas activa al administrarse genisteína. Asimismo, la genisteína mostró efectos parecidos a los del 5Aza-C, con el cual se están realizando ensayos clínicos de fase II actualmente al emplearlo como tratamiento para el cáncer de próstata. Puesto que la genisteína es una isoflavona natural ingerida en la dieta y no tóxica, estos resultados indican que la genisteína puede ser una sustancia terapéutica ventajosa y novedosa para tratar el cáncer de próstata. Leer estudio

La genisteína y resveratrol, en monoterapia o en combinación, puede suprimir el cáncer de próstata en ratas SV-40
En ratas SV-40 Tag, la genisteína y el resveratrol administrados en la dieta, en monoterapia o en combinación, redujeron de manera significativa el grado más grave de cáncer de próstata (lesiones mal diferenciadas) en estos animales transgénicos (en una proporción de 2,9, 1,9 y 3,2 respectivamente en comparación con aquellos que siguieron la dieta de control). Al examinar los lóbulos prostáticos por separado, fue en la próstata ventral donde la genisteína tuvo su mayor eficacia de inhibición de tumores mal diferenciados, con una disminución de 7 veces. El resveratrol también pudo inhibir tumores mal diferenciados en la próstata ventral, con una disminución de 2,5 veces. El tratamiento más efectivo fue la combinación de una dosis alta de genisteína más resveratrol, ya que inhibió por completo el desarrollo de tumores mal diferenciados en la próstata ventral. El tratamiento con genisteína, con resveratrol y con genisteína a dosis altas más resveratrol dieron lugar a que desapareciera el cáncer en la próstata ventral en un 13%, un 18% y un 24% respectivamente. A pesar de que es poco provable que los polifenoles acaben con el cáncer de próstata, estos datos apoyan el hecho de que la genisteína y el resveratrol son capaces de inhibir el desarrollo del cáncer de próstata, en especial de los tumores mal diferenciados. En un sentido práctico, conseguir tal inhibición en el hombre sería un logro muy deseable.
Nuetros estudios, realizados en el momento de la transición desde la neoplasia intraepitelial prostática hasta las lesiones de cáncer al cabo de 12 semanas, pusieron de manifiesto que los tratamientos con polifenoles disminuían la proliferación celular y la expresión de la proteína IGF-1 en la próstata. Asimismo, la genisteína en monoterapia indujo la apoptosis y disminuyó la SRC-3 en la próstata ventral. El resveratrol en monoterapia aumentó la expresión de la proteína AR en la próstata dorsolateral, lo cual respalda el concepto de que la AR funciona como supresor tumoral antes de que se produzca el desarrollo del cáncer de próstata mediante la inhibición de la proliferación no controlada en el epitelio prostático normal. La modulación de la señalización de los receptores de las hormonas esteroideas sexuales y el factor de crecimiento junto con una disminución de la proliferación celular es coherente con la quimioprevención observada en los ratones TRAMP al administrárseles genisteína y resveratrol.
A pesar de que es poco probable que lo polifenoles en monoterapia eliminen el cáncer de próstata, los datos respaldan que la genisteína y el resveratrol son capaces de inhibir el desarrollo del cáncer de próstata, en particular el de los tumores mal diferenciados. En un sentido práctico, conseguir tal inhibición en el hombre en aproximadamente 10-20 años sería un logro de crucial importancia. Las dosis administradas en nuestros estudios son importantes desde el punto de vista fisiológico y alcanzables desde el viológico, pero requerirían un consumo elevado de genisteína y resveratrol. En el caso de la genisteína, es alcazable si se consumen suplementos de tofu o soja. Por otra parte, el resveratrol se encuentra en concentraciones bajas en el vino tinto y en las uvas. Por lo tanto, podría ser que en esata ocasión los suplementos alimenticios fueran la única solución. Leer estudio

Los efectos combinados de la terazosina y la genisteína en una estirpe celular afectada de cáncer de próstata humano metastásico no hormonodependiente
En conclusión, el tratamiento combinado con terazosina/genisteína fue más eficaz que ambos en monoterapia a la hora de inhibir el crecimiento celular y la expresión de VEGF así como de inducir la apoptosis de la estirpe celular afectada de cáncer de próstata metastásico no dependiente de andrógenos denominada DU-145. Las dosis usadas en este estudio se administran en un intervalo de dosis antineoplásico más bajo y no tóxico, lo que sugiere que esta combinación podría tener un uso terapéutico. Leer estudio

Taxol sinergiza junto con antioxidantes en la inhibición del crecimiento de las células afectadas por cáncer de próstata resistente al tratamiento hormonal
En conclusión, además de la vitamina E, la incorporación de estos antioxidantes a lOs tratamientos citotóxicos basados en taxan ofrece estrategias alentadoras para combatir los cánceres de próstata resistentes al tratamiento hormonal.  Leer estudio

La genisteína como tratamiento multi-dirigido contra el cáncer
En conclusión, la genisteína ingerida a través de alimentos naturales ejerce efectos anticarcinogénicos mediados por su(s) mecanismo(s) de acción moleculares pleiotrópicos sobre el ciclo celular, los procesos apoptósicos celulares, la angiogénesis, la invasión del cáncer y la metástasis. Estos efectos pueden ser principalmente debido a los efectos específicos de la genisteína sobre las vías de señalización Akt, NF-κB, MMPs y Bax/Bcl-2. No obstante, realizar más investigaciones básicas y clínicas en el campo de las isoflavonas, el cual está creciendo rápidamente, debería dar lecciones acerca de su aplicación en el campo del cáncer. Tales avances aportarán datos esenciales que serán respaldados por ensayos clínicos que demostrarán o desecharán el hecho de que las isoflavonas o la genisteína pueda ejercer de quimiopreventivo y/o sustancia terapéutica contra los cánceres humanos con total confianza.  Leer estudio

Licopeno e isoflavonas de soja en el tratamiento del cáncer de próstata
Los datos sugieren que el licopeno y las isoflavonas de soja tienen actividad en los pacientes con cáncer de próstata con recidiva de PSA pueden retrasar la progresión tanto de los cánceres sensibles al tratamiento hormonal como de los resistentes al mismo. No obstante, podría no darse un efecto aditivo entre los dos compuestos al administrarse de manera conjunta. En el futuro, los estudios tendrán que centrarse en conocer mejor la eficacia del licopeno y las isoflavonas de soja en el tratamiento del cáncer así como en el mecanismo de las posibles interacciones negativas que puedan darse entre ellos.  Leer estudio

La acción del calcitriol y la genisteína inhibe la vía metabólica de las prostaglandinas: posible tratamiento combinado para tratar el cáncer de próstata
La capacidad de la genisteína y el calcitriol para inhibir la síntesis y los efectos biológicos de las prostaglandinas (PG) proinflamatorias sugiere que la combinación de ambos puede ser útil como quimiopreventivo o estrategia terapéutica en el cáncer de próstata. Hasta hace poco, se estaban investigando de manera activa los AINE como sustancias para la prevención del cáncer debido a su capacidad de inhibir la actividad de la COX-2 y la síntesis de PG. Sin embargo, los AINE, en particular los inhibidores selectivos de la COX-2, se asocian a eventos cardiovasculares adversos y su uso para la quimioprevención del cáncer ha dejado de estar bien visto. A pesar de los prometedores resultados obtenidos, se han interrumpido un gran número de ensayos clínicos en los que se empleaban AINE selectivos de la COX-2. Nuestra investigación sugiere que el calcitriol y la genisteína pueden ser una opción relativamente inocua para inhibir la vía metabólica de las PG. Debido a que el calcitriol regula un gran número de genes involucrados en la vía de las PG, es muy eficaz a la hora de inhibir la generación y las acciones de las PG y, en combinación con genisteína, potencia su capacidad de inhibir la vía de las PG. El calcitriol es una sustancia inocua cuyo único efecto secundario es la hipercalcemia e, incluso ese efecto indeseable se reduce considerablemente si se sigue un tratamiento intermitente con calcitriol. La genisteína es un compuesto principal de la soja y, como sustancia nutritiva, tiene toxicidad escasa o nula. Por tanto, la combinación de estas sustancias relativamente inocuas, las cuales están disponibles en el mercado, son económicas y se administran por vía oral, supone una opción terapéutica eficaz para el tratamiento del cáncer de próstata con la que se puede experimentar con prontitud en ensayos clínicos. Leer estudio

Sensibilización al cisplacino de las células de cáncer de ovario mediante el uso de genisteína: el papel de NF-κB
En conclusión, los datos aportados en este estudio respaldan firmemente nuestra hipótesis acerca de que un pretratamiento con genisteína podría acabar con la resistencia farmacológica de las células de cáncer de ovario, tal como han documentado el aumento de la inhibición del crecimiento celular y la inducción de la muerte celular apoptósica. También hemos puesto de manifiesto que la quimiosensibilización de las células cancerosas ováricas mediada por genisteína a las sustancias quimioterapéuticas convencionales fue debida en parte a la inactivación de la actividad de unión del DNA de NF-κB y sus genes en dirección 3′. Nuestros resultados justifican la realización de más estudios clínicos y preclínicos con el fin de evaluar el valor de la genisteína a la hora de acabar con la resistencia farmacológica del cáncer de ovario para mejorar la supervivencia global de las pacientes diagnosticadas de cáncer de ovario, en especial la de aquellas cuyo cáncer es de carácter farmacorresistente.  Leer estudio

Avances en el tratamiento de cáncer de ovario: un posible papel de las sustancias fitoquímicas antiinflamatorias
En conclusión, los resultados de muchos estudios publicados descritos con anterioridad indican que está definitivamente implicado en la progresión y el tratamiento del cáncer de ovario. Algunas sustancias fitoquímicas antiinflamatorias tienen actividad a la hora de intervenir en la vía de la inflamación mal regulada y pueden desempeñar un papel beneficioso en el tratamiento del cáncer de ovario epitelial. No obstante, quedan muchos interrogantes por responder. Se necesita urgentemente realizar más investigaciones en este campo.  Leer estudio

La proliferación sostenida en el cáncer: mecanismos y nuevas dianas terapéuticas
El tratamiento dirigido contra los mecanismos implicados en la proliferación celular cancerosa no controlada se convertirá cada vez más en el tratamiento de referencia para los pacientes oncológicos, y esta revisión ha destacado algunas de las “mejores” dianas que se encuentran en varias vías las cuales participan en la regulación de la proliferación celular. Por ejemplo, en el caso de los tejidos preneoplásicos, tendrá que bloquearse la expresión de Snail1/2 para mantener la expresión de la E-cadherina y la integridad tisular y para evitar la transición epitelio-mesénquima (TEM). Una vez se ha perdido la E-cadherina y aparece hipoxia, será necesario bloquear HIF-1 ya sea de manera directa o indirecta mediante el empleo de inhibidores de la Hsp90, de las itopoisomerasas o de la mTOR. Actuar de manera dirigida contra la aparición y el crecimiento de células madre cancerosas (CMC) constituirá un gran desafío debido al solapamiento que existe entre las vías metabólicas identificadas hasta la fecha de las CMC y las células madre (CM). Mantener las CMC latentes podrá evitar la reactivación de la enfermedad una vez se hayan eliminado las células tumorales maduras con el uso de tratamientos convencionales y se haya logrado la remisión, si bien no está claro cómo lograr este objetivo. Los antagonistas de las señalizaciones Wnt, Hh y p38-MAPK podrían resultar útiles a tal efecto, mientras que aumentar la expresión de C/EBPα, la cual estimula la diferenciación, podría provocar la aparición de un estado de sensibilidad al tratamiento por parte de las CMC. Además de en el caso de la catenina-β, buscar antagonistas de las vías metabólicas Notch, HER2/ErbB2 e IGF-1/IGFR1 tiene un fundamento, ya que desempeñan un papel fundamental en las decisiones del destino celular y, a menudo, se reactivan al aparecer cáncer. En el contexto del ciclo celular, será importante iniciar un actuar de manera dirigida contra la ciclina D y la cdk4/6. Entre los cánceres sensibles a hormonas, el ER (receptor de estrógenos) y el AR (receptor de andrógenos) son dianas fundamentales para el desarrollo continuo de antagonistas. Por tanto, para el desarrollo y evaluación farmacológicos futuros, puede contemplarse el uso un número de posibles dianas de la señalización proliferativa sostenida.  Leer estudio